"El Pacto entre Rusia y Corea del Norte: Un Giro en la Geopolítica Global"

Por Victor D Manzo Ozeda 

El reciente acuerdo entre Rusia y Corea del Norte es menos un himno a la paz que una fanfarria de desafío geopolítico, una alianza entre dos naciones frecuentemente marginadas por el orden mundial predominante. Este pacto, sellado con la promesa de asistencia militar mutua y colaboraciones en campos tan críticos como la tecnología nuclear y la exploración espacial, no es solo un movimiento táctico, sino un claro mensaje al bloque occidental liderado por Estados Unidos.

Rusia, afectada por sanciones y aislada por su agresiva política exterior, se ve impulsada a buscar aliados entre aquellos que comparten su resentimiento hacia la hegemonía estadounidense. Corea del Norte, por su parte, encuentra en Rusia un poderoso respaldo para su programa de armamento, crucial para su estrategia de supervivencia nacional y afirmación de soberanía.

La alianza plantea serias preguntas sobre la estabilidad regional y global, proyectando una sombra sobre las aspiraciones de un orden mundial más cooperativo y regulado. El pacto refleja un escenario internacional cada vez más fracturado, donde los bloques de poder se definen más por sus oposiciones que por sus afinidades.

Este tratado no es un simple acuerdo bilateral; es un espejo de las tensiones globales y un recordatorio de que en la política internacional, los enemigos de mis enemigos pueden ser mis aliados más efectivos. Este pacto simboliza un momento crítico en el que la diplomacia da paso a la estrategia de confrontación, un escenario que podría redefinir las alianzas y las enemistades en todo el mundo.